30 años de Casman Suministros
En Septiembre de 1988 José Luis Andrés Cortés comenzaba una aventura nueva tras muchos años en Sandvik Coromant. Se trasladaba con su mujer y sus dos hijos desde su Valencia natal hasta Albacete, donde aplicaría todos sus conocimientos del sector de la herramienta convirtiéndose en distribuidor oficial de Sandvik Coromant en Castilla La Mancha.
Desde ese día, treinta años atrás, ha habido muchos cambios, pero la esencia de Casman sigue siendo la misma: una empresa familiar volcada en dar servicio a sus clientes. Hoy hablamos con Jose Luis, hijo, para mirar hacia atrás y hacer un repaso de los últimos treinta años.
Cuando comenzó Casman tú tenías sólo 5 años. ¿Qué recuerdas de los inicios de Casman?
La verdad es que no demasiado. Lo que más recuerdo es venir todos los años durante las vacaciones de Navidad a ayudar a hacer inventario. Hacía un frío que pelaba y se te congelaban las manos contando tornillos y tuercas!
¿Cuándo empezaste a trabajar aquí?
Hace casi veinte años. Tuve una época un poco rebelde, ya que no me concentraba en los estudios, así que mi padre pensó que trabajar a su lado me ayudaría. Siempre me ha gustado tratar con gente y desde el principio disfruté mucho pasando mucho tiempo con mi padre visitando talleres y creando relaciones personales con los clientes.
¿Cuál es la lección más valiosa que aprendiste de tu padre?
Ser honrado y nunca engañar a los clientes. Hay veces que hay que tener conversaciones difíciles cuando surgen problemas, pero es muy importante ser honesto y transparente para crear una relación de total confianza con nuestros clientes. También me enseñó a nunca hablar mal de la competencia y simplemente dedicarme a hacer mi trabajo lo mejor posible.
¿En qué momento tomaste el mando de Casman? ¿Cómo fue aquella experiencia?
En 2011 mi padre fue diagnosticado con un cáncer de pulmón que le forzó a alejarse del trabajo para concentrarse en el tratamiento y su salud. Fueron momentos muy duros, ya que además de todo lo nuevo que suponía estar al frente de una empresa, estábamos todos muy preocupados por la salud de mi padre. He de decir que durante estos años todos nuestros clientes fueron muy comprensibles con la situación y a nivel personal, nuestra familia recibió mucho cariño por parte de ellos.
Hablemos de momentos más felices. ¿Cuáles han sido algunos de los momentos que recuerdas con más ilusión?
Tuve la oportunidad de visitar la fábrica de Sandvik hace unos años. Fue miuy interesante ver el proceso de fabricación de las herramientas que comercializamos y ver la magnitud de la empresa que tenemos detrás de nosotros, lo cual siempre te da seguridad.
¿Cuáles han sido los cambios más grandes q has visto al cabo de los años en el mundo del mecanizado?
La industria 4.0 y la introducción del mundo digital aporta gran cantidad de datos que antes eran mucho más difíciles de obtener. Está haciendo que los talleres puedan ser mucho más eficientes y con ello mejorar su productividad.
¿En qué se diferencia el Casman de antes con el de ahora?
Ahora estamos más especializados y tenemos un mayor conocimiento de los productos. Sin embargo, hay cosas que no han cambiado ni cambiarán nunca, y es que para nosotros nuestra razón de ser es ofrecer un servicio a nuestros clientes para ayudarles a encontrar soluciones.
¿Cuál crees que ha sido el motivo por el que después de 30 años sigue existiendo Casman?
Nuestro servicio, nuestra pasión y dedicación por nuestro trabajo, y sobre todo la lealtad de nuestros clientes. Contamos con algo más que clientes. Para nosotros, muchos de ellos se han convertido en parte de la familia de Casman.
Desde parte de todo el equipo, aprovechamos para desearos un Feliz Año 2019 y daros las gracias por vuestro apoyo no sólo durante el 2018, sino por todos estos años.